Los empleados de Canal 13 pidieron la intervención del Sindicato de Televisión porque acusan a Feliciana Rodríguez Saá de “apoderarse” del manejo de la emisora estatal a través de una productora que terceriza los servicios. Dicen que los contratados por la hija de Adolfo Rodríguez Saá son favorecidos con elevados salarios y adicionales por coberturas especiales, “mientras que a nosotros, que tenemos en algunos casos más de 20 años de trabajo, nos tienen con bajos sueldos y relegados a una ínfima programación. Todo porque Feliciana se peleó con Alberto Rodríguez Saá, dejó el Diario y la pusieron acá”.
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Este martes, integrantes del Sindicato de Televisión mantendrán una reunión con los empleados del canal “ya que la situación la queremos plantear en esa instancia, ante quienes nos representan. No puede ser que los contratados por la productora de Feliciana cobren tres veces más que nosotros”, indicó uno de los trabajadores que pidió reservas de sus datos.
El descontento entre los empleados subió de tono durante la cobertura del Carnaval de Potrero, donde los “contratados por la productora de Feliciana hicieron toda la cobertura especial, discriminando a quienes tienen una amplia trayectoria y años de trabajo en el canal”.
“Para colmo, la productora de Feliciana, según hemos podido averiguar, no contaría con el aval de la AFSCA. Todo eso no se investiga porque, lógicamente, su dueña tiene poder para tapar todo. Nosotros no podemos quejarnos porque seguramente nos despedirán”, acotó.
La citada productora tiene, según advierten los empleados, prácticamente toda la programación del canal en la mañana, la tarde y la noche. “Los que conducen la mayoría de los noticieros son contratados. Todo eso está pasando desde hace tiempo, cuando la hija de Adolfo comenzó a interferir en el canal”.
“Planteamos varias veces esta situación al director, Fernando Sad, pero todo se cocina más arriba y él no puede hacer nada. Por eso apelamos ahora al Sindicato y a que se conozca lo que está pasando”, añadió.
Los empleados están convencidos que todo vino como consecuencia de una “pelea” en la familia Rodríguez Saá. “Feliciana se peleó con Alberto y, para calmar los ánimos, la dejaron tener poder para hacer negocios en el canal. Así fue que, a través de una productora supuestamente trucha, maneja a su gusto y propio beneficio la programación y los contratos”
fuente sanluisnoticia.com.ar
