Los caminos de la Provincia en su peor momento. En lo que va del año ya suman 30 las muertes en accidentes de tránsito en la Provincia, tres veces más que en los primeros dos meses del 2013. Las cifras son contundentes y no se puede culpar únicamente a impericias humanas.
Todo aquel que viaje por Ruta 7 sabe que conducir por el lado derecho es romper el tren delantero, entonces todos conducen por el izquierdo. Que todos vayan por el izquierdo es muy peligroso sumado a que las condiciones del asfalto tampoco son optimas. Los arbustos en los canteros centrales tapan la visibilidad y le pone otro condimento a la aventura de viajar por San Luis. El Gobierno de la Provincia se rasga las vestiduras por tener una cantidad para nada despreciable de kms de autopista. Lo que nunca cuenta es el estado de ésta.
Banquinas mortales.
El morder una banquina a mas de 100 km/h puede significar encontrar la muerte o salir con vida con mucha suerte, con el paso de los años la carpeta de hormigón quedo a mas de 20 cm de profundidad a la banquina. Son muchas las muertes producidas en las autovías cuando algún viajante que no conoce el estado de las mismas se descarrila o muerde las mismas, generalmente se intenta dar un volantaso asiendo que los vehículos den vueltas en trompos terminando en el centro de las autovia o dados vuelta a mitad del carril por el que venían.
Millones se han gastado en la construcción de estas rutas y en el mantenimiento, lo que nos lleva a un formidable negocio para la empresa licitante.
Otro gran negocio es el peaje. Cuesta un 125% más que los peajes de la misma ruta en la provincia de Mendoza o Córdoba.
En definitiva, hasta que la obra pública no sea un negocio para los dueños del poder en la Provincia, inocentes dejaran su vida en nuestras rutas.